La Ventana Indiscreta de Casa de Muñecas. Primeros pasos hacia Hitchcock

#ViajesCreativos:

LA VENTANA INDISCRETA DE
NUESTRA CASA DE MUÑECAS.
Primeros pasos hacia Hitchcock

26 de Marzo de 2021 · Por Estudo do Momento

“Un viaje de mil millas comienza con un primer paso”.
Lao-Tse.

Con este nuevo artículo de Estudo Momento, iniciamos un gran camino, el de nuestros #viajescreativos. Compartiremos con vosotros reflexiones artísticas, hallazgos, inspiraciones, referencias… todo con la intención de documentar, con la mayor precisión posible, nuestros procesos artísticos. Sin más, ¡empecemos!

¿Cómo es posible relacionar a Ibsen con Alfred Hitchcock? Si eres un lector habitual de nuestro blog Estudo Momento sabrás que hace tiempo que venimos anunciando un proyecto audiovisual homenaje al maestro del suspense, sir Alfred Hitchcock. Si eres nuevo, ¡Bienvenido! Encantados de compartir contigo nuestra pasión por el cine clásico.

La obsesión de Estudo Momento por Alfred Hitchcock viene de lejos, desde nuestros inicios como compañía teatral, y en este artículo queremos dejar constancia de las similitudes existentes entre su obra La ventana indiscreta (Rear Window, 1954), y nuestra versión del clásico teatral Casa de Muñecas (A Doll´s House, 1879), de Henrik Ibsen, escrita por Xoán Carlos Mejuto a finales de 2016.

Pero, ¿qué tendrá que ver Ibsen, para muchos padre del teatro feminista, con Hitchcock, para algunos, un misógino? Arrojemos un poco de luz.

Si coincidimos en que la obsesión artística es la misma: la mujer, sólo cabe preguntarnos… ¿Desde dónde se aborda el universo femenino? ¿Desde qué óptica? ¿Desde qué mirada?

Nos resultaría sencillo esbozar una posible adaptación de Casa de Muñecas dirigida por Hitchcock para la gran pantalla. Los primeros trazos del storyboard nos llevarían, sin forzar demasiado nuestras imaginaciones, a planos y atmósferas similares a las de Rebeca, 1940. La amenaza de Krogstad, las miradas lascivas del doctor Rank, un Torvaldo Helmer interpretado por Laurence Olivier… ¡Hete aquí un reto interesante! ¿A quién le darías el papel de Nora? Tic, tac. Tic tac…

“En el caso de esta versión de Casa de muñecas el proceso ha sido realmente curioso. Pues tratando de ser bastante fiel y respetuoso con la historia de Nora hemos encontrado espacios novedosos y, a mi juicio, fascinantes. No diría que llegue a ser una obra original, ni mucho menos, pero sí creo que puede revelar aspectos de la obra de Ibsen que quizá por los condicionantes de su época él decidió camuflar o como mínimo atenuar.” 

Xoán Carlos Mejuto
para la Revista Pop Up Teatro.

Camuflar, atenuar, ocultar… Mientras Ibsen oculta con su pluma, -nunca llega a contarnos por qué Nora hace lo que hace en la escena final-, Hitchcock insinúa con su cámara.

Ambos autores, Ibsen y Hitchcock, trabajan revelando lo oculto, dejando “un hueco incómodo” por el que se cuelan nuestros intelectos. Ambos son grandes maestros de sus respectivos oficios y, en definitiva, hombres enamorados de la femineidad. 

“Nuestra versión de Casa de muñecas se articula como un experimento escénico, intentamos contar la historia sólo a través de las escenas del matrimonio Helmer: Nora y Torvaldo. Así de sencillo.”

Como en toda buena adaptación de una obra de teatro a guión cinematográfico, la clave está en “mantenerlo sencillo” y crear una obra totalmente nueva. Como le aconsejaba el propio Hitchcock a Truffaut en el famoso libro “El cine según Hitchcock”, publicado en 1966. Pero nosotros no estábamos creando un guión cinematográfico… 

“Tras tener la intuición de que esto era posible, apenas era necesario poner manos a la obra y realizar una adaptación escrupulosamente respetuosa con el original de Ibsen, consciente quizá de que ya me había tomado bastantes libertades con este maravilloso clásico.

El resultado es sorprendente. La ausencia de tramas secundarias y de otros personajes enfrenta irremisiblemente a los dos protagonistas recrudeciendo el conflicto que subyace en su relación. Torvald Helmer acaba representando todas las fuerzas del antagonismo para Nora, y esto acentúa el conflicto y destila todo el poder dramático de la obra.

Gracias a este hallazgo estoy relativamente satisfecho en cuanto al dilema del que hablaba al principio, queriendo ser fiel a Ibsen creo haberlo sido conmigo mismo.”

Xoán Carlos Mejuto,
autor de la versión de 1879. Casa de Muñecas.

Dejaremos al lector la estimulante tarea imaginativa de pensar en posibles adaptaciones cinematográficas del universo de Henrik Ibsen realizadas por Alfred Hitchcock, -sugerimos empezar el experimento con Hedda Gabler…-. 

Nosotros, por nuestra parte, dejamos constancia en este artículo de nuestras “inspiraciones hitchcocknianas” para el montaje teatral 1879. Casa de Muñecas, escrita y dirigida por Xoán Carlos Mejuto e interpretada por el propio Mejuto en el papel de Torvaldo Helmer, y por Iria Ares, en el papel de Nora. Como apunte, primer trabajo de la actriz.  

Siéntense y disfruten del viaje a la Casa de Muñecas a través de la Ventana Indiscreta de Estudo Momento.

#momentoestudo:

LA CARTA DE KROGSTAD

Al afrontar el montaje de cualquier clásico, volvemos a la eterna pregunta: ¿Qué podemos ofrecerle nosotros a Ibsen? En 1879, el momento cumbre de Casa de Muñecas fue el portazo final. Un escándalo para la moral de la burguesía y la alta sociedad europea. ¿Una mujer que abandona a su marido y a sus hijos? Una puta o una loca. 

Nuestra apuesta no está en el portazo, que consideramos un símbolo, sino en lo que sucede antes, en la decadencia de la relación matrimonial y en la perversión del sistema patriarcal: un hombre que trata a una mujer como un ser inferior es capaz de cualquier cosa, si se dan las circunstancias adecuadas…

Con 1879. Casa de Muñecas queremos que el espectador se comporte como un mirón. Planteamos una distancia espacial y temporal, para que se sienta cómodo y baje la guardia amparado en el avatar del anonimato. Le planteamos “una mirada indiscreta” al matrimonio, a la intimidad y a las relaciones con el otro. Abrimos una ventana, que se convertirá en espejo y nos lanzará a la cara nuestras verdades. Ibsen revoluciona el sistema moral de occidente convirtiendo en heroína a una tirana, una mujer que abandona su hogar.

Volvamos al cine clásico de Hollywood, en el que las mujeres sacaban lo mejor de sí mismas… para conquistar a los hombres. El objetivo final de Grace Kelly en La ventana indiscreta es “cazar al cazador”. Poner -literalmente-, el anillo en el dedo a James Stewart, el galán errante, el fotógrafo aventurero que, a causa de un accidente, se ve obligado a observar, impedido.

Tomando esta idea de “parálisis masculina” afrontamos la construcción de los personajes: Helmer es un lisiado moral. Sólo conoce lo que ha aprendido de la sociedad. Solo sabe ser, lo que se espera de él. Nora, se mueve por toda la casa buscando -de manera inconsciente- su libertad. Lucha, la enfrenta, se rinde y la encuentra. A diferencia de Kelly, su actividad no es sólo física, sino más bien espiritual. 

Su aventura tendrá el mejor de los finales: el milagro de despertar a su propia consciencia. La fuerza que pone fin al conflicto no es la fuerza fatal del destino, sino la rendición que eleva el espíritu y convierte a Nora en una heroína existencial.

Estudo Momento

[TEASER] 1879. Casa de Muñecas.

Premio Luisa Villalta pola Igualdade da Deputación de A Coruña.