Desde A Coruña al Teatro Lara

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Desde A Coruña al Teatro Lara

20 de Julio de 2022 · Bombo Estudio

«El diseño nunca debería decir “Mírame”. Debería decir: “Mira esto”».

_ David Craib

Hace ya unos años que trabajamos en el diseño y comunicación de Estudo Momento; trabajando codo con codo con personas que se dedican en cuerpo y alma al mundo de la cultura y el espectáculo, llegas a entender y descubrir ese mundo fascinante del teatro envuelto siempre en un halo de misterio e intrigas que a veces incluso, no llegas a entender del todo.

Entre otros proyectos e ideas, la obra 1888. Señorita Julia llegó a nuestro estudio casi de casualidad y sin hacer demasiado ruido. Sinceramente, estaba eclipsada por otros proyectos que parecían más interesantes y prometedores. La versión de este clásico, llegó de la mano de su creador Xoán C. Mejuto, quién nos explicó detalladamente la idea, el guión, los primeros esbozos del atrezzo y lo que tenía en mente para el vestuario. Tomamos notas, así sin más, porque lo cierto es que luego comentábamos con él otro proyecto de esos que proyectaba su sombra sobre los demás.

Llegaron los primeros bocetos, aprovechando material de aquí y de allá para dar forma a la que sería la idea inicial, la primera toma de contacto con el espectáculo que nos estaban contando y que debíamos plasmar sobre un cartel.

“Debemos romper con todo lo anterior”, esa era la premisa. Pero la verdad es que eso no es fácil cuando llevas tanto tiempo trabajando con alguien y crees conocer sus gustos, por lo que en tu cabeza, eso se transforma en diseñar algo que consideras que no le va a gustar. Un retrato realizado por Eduardo Momeñe por aquí, un retrato realizado por Gabi Gago por allá, colores contrastados, tipografía grunge, y no sabemos muy bien cómo, pero la primera idea rompió con todo lo anterior a lo que estábamos acostumbrados.

Una vez más, el diseño nos sorprendía y nos recordaba la capacidad visual de comunicación que posee, consiguiendo generar diferentes sensaciones y perspectivas a las que estamos acostumbrados. Y sino, que se lo digan a los conocidos de Iria y Xoán Carlos, que dejaron claro que no contemplaban a sus amigos de siempre en este cartel. ¿Esa era la idea no? Romper.

La idea inicial empezó a funcionar y 1888.Señorita Julia ya tenía fecha de estreno: Arteixo, sería la elegida. ¡Pues venga! Qué mejor momento para conocer la obra y entender eso que nos transmitía Xoán C. Mejuto en sus bocetos iniciales. Allá que fuimos a ocupar nuestras butacas para disfrutar de una obra que prometía ser entretenida, macabra según sus actores, pero que sinceramente todavía no sabíamos muy bien el espectáculo que íbamos a encontrarnos sobre las tablas. Desde luego, esos 90 minutos lo cambiaron todo.

Foto: Xavi Gantes

Una hora y media de teatro que consiguió remover nuestras entrañas, provocarnos sensaciones contradictorias y sobre todo, plantear delante de nuestros ojos múltiples preguntas y cuestiones que creíamos que estaban ya respondidas y zanjadas. La obra nos traslada al año 1888, donde condes, señoritas y criados ocupaban palacios y se enzarzaban en historias del día a día. Pero ¿acaso la historia oculta de empoderamiento femenino, egos de masculinidad y lucha de clases que vimos no nos recuerda en cierto aspecto a la actualidad en ciertos aspectos? Sea como fuese, la intensidad de la función nos dejó asombrados y salimos de la sala con un concepto claro: la imagen gráfica debía estar a la altura transmitiendo así toda la fuerza del espectáculo.

Volvimos a ponernos manos a la obra diseñando todo el material corporativo de 1888. Señorita Julia: cartel, dossier de venta, contenido de redes…porque Madrid nos esperaba para descubrir el talento gallego una vez más.

Diseño dossier de venta

No lo vamos a negar, gracias al material fotográfico aportado por Estudo Momento, Xavi Gantes y Gutier Rolán, todo fue más fácil; solo tuvimos que dar en la tecla justa del diseño y plasmar todas las sensaciones e intensidad que nosotros mismos vivimos al ver la obra. Un par de pruebas y ¡listo!

Algunos, los menos, tildarán el diseño de atrevido, otros dirán que busca la polémica y nosotros decimos que transmite a la perfección la intensidad de la obra. ¡Oye! Y ni tan mal por los buenos comentarios que recibimos desde Madrid.

Además, ya lo decía Iria Ares: “ Strindberg nos grita una verdad desde el pasado que nos sigue incomodando hoy: nos gusta juzgar a los demás. Esta sociedad premia la elocuencia y el lenguaje políticamente correcto. Strindberg nos arroja verdades insoportables desde… el silencio. Siempre será un autor incómodo y eternamente actual”. Incómodos, si, eso puede ser lo que haga sentirse este diseño a los más conservadores.

Una vez más, el diseño nos da una lección y nos enseña de nuevo que nunca debemos subestimar una idea ni un proyecto, porque absolutamente todos los proyectos con un poco de trabajo pueden despegar y explotarnos en las manos, mostrando todo su potencial. Y si no, que se lo digan a nuestro diseño, ocupando las calles de Madrid impreso en una lona de 2 metros, esa Señorita Julia que entró en el estudio sin hacer demasiado ruido y vino para revolucionarlo todo.

Diseño cartel 1888. Señorita Julia

Cecilia Martínez
Bombo estudio